El primer acuerdo.
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El primer acuerdo es ser impecable con tu palabra y nunca usarla contra ti u otros.
¿Sabías que la palabra “impecable” proviene del latín, que significa “sin pecado”? En ese sentido, ser impecable con tu idioma significa nunca usarlo contra ti mismo, ya que cualquier daño hecho a ti mismo se considera pecaminoso.
Tal daño puede venir en forma de auto-juicio o culpa. Puedes pensar que eres demasiado gordo o demasiado estúpido. Simplemente al albergar estos pensamientos, estás usando tus palabras contra ti mismo y emitiendo un juicio. En lugar de hacer esto, podrías insistir en reafirmar lo bueno que eres y cuánto te amas a ti mismo.
Es por eso que es clave recordar que las palabras que usas son poderosas y pueden liberarte o esclavizarte a ti y a otras personas. Entonces, si bien una palabra puede parecer una mezcla aleatoria de sonidos, en realidad es mucho más.
Tu palabra te permite comunicarte y expresarte, pero también transforma tu forma de pensar. En este sentido, tus palabras pueden crear ideas en tu mente, dar forma a tu sentido de la realidad y afectar las opiniones de los demás.
Solo considera esta historia.
Una mujer inteligente y afable tenía una hija a la que amaba con todo su corazón. Un día, la mujer llegó a casa, deseando tener un momento de tranquilidad a solas. Sin embargo, su hija estaba de buen humor, cantando bulliciosamente.
Al perder el control sobre sí misma por un momento, la mujer le gritó a su hija: “¡Tienes una voz estúpida! ¡Cállate!”
Debido a esta experiencia, la hija creyó lo que su madre había dicho, haciendo un acuerdo consigo misma de que su voz era fea y molesta. No cantó durante mucho tiempo e incluso tuvo dificultades para hablar con la gente.
Simplemente muestra cómo las palabras pueden esclavizarnos. Solo piensa en la frecuencia con la que te has dicho a ti mismo que no eres lo suficientemente bueno. Cada vez que haces esto, estás haciendo un acuerdo y optando por cumplirlo.
Es por eso que el primer acuerdo es no usar la palabra contra ti mismo. A continuación aprenderás sobre el segundo: no tomar nada personalmente.